Hoy es un día distinto, las copas de los árboles alcanzan el cielo, las ventanas anaranjadas se vuelven amarillas, como de antaño, añejas, como si el tiempo hubiese pasado por años en un soplido, sigo observando y las nubes son doradas, las cascadas mas azules que de lo normal, hoy no es un día cualquiera, las puertas rechinan a los pasos que entran porque son bienvenidos, las astillas se contornean, danzando sin parar, en un laberinto sin retorno, las luciérnagas se callan para escuchar ellas también la madrugada amaneciendo, el sol se aquieta como esperando algo del cielo y las gotas caen en el otoño frío, sin escarcha, las hojas se mueven como bailarinas del coliseo romano, las violetas cantan como presentando una obra, los pájaros cantan y rechinan sus picos, los lagartos salen a la luz del día, presienten que algo grande se acerca y el horizonte flamea como costal de trigo y las flores aparecen de la tierra, como cuando le crece el pelo a un niño soñador, veo y respiro otro aire, un aire de montañas y ríos que desembocan en las cataratas de donde todo viene y a donde todo va.
Hoy, es un día distinto.
Por Kosmisch